En medio del bosque cada año niños, niñas y adultos traen a la vida personajes de cuentos clásicos en escenarios naturales en el aclamado Carnaval del Sur, en Puerto Varas. Carolina Cruz, la ganadora del Premio Mujer Impacta 2023, es la creadora de este festival en el que participa el que quiera, tratando así de eliminar la brecha cultural que hay en el país.

En medio del bosque resaltan trajes coloridos y máscaras realistas de animales. Niños, niñas y adultos traen a la vida personajes de cuentos clásicos en escenarios naturales. Más de 4.000 personas se deleitan año tras año con las actuaciones y danzas del aclamado Carnaval del Sur, en Puerto Varas.

Carolina Cruz (46) es la creadora de este festival que combina las artes escénicas con la divulgación científica. Con él, busca darle valor al patrimonio natural y cultural de Chile, a través de una instancia de celebración en comunidad mediante el teatro.

Carolina fue criada en Palena, Región de Los Lagos, pero viajó a Santiago con tan solo 18 años para estudiar Periodismo. Estuvo tres años en esta carrera, cuando decidió seguir su instinto y dedicarse al teatro. Egresó de la Escuela Internacional del Gesto y la Imagen La Mancha, y luego estudió gestión cultural en Buenos Aires.

Permaneció cinco años en Argentina, y de vuelta en Chile, decidió unir conocimientos. “Quería mover máscaras y al mismo tiempo invitar a la comunidad a un espacio de reflexión inclusivo donde participara el que quisiera, tratando así de eliminar la brecha cultural que hay en el país. Mi foco era educar a la ciudadanía”, comenta.

En 2013 constituyó la fundación Carnaval del Sur y un año después se realizó el primer festival. Desde entonces, hacen castings ciudadanos en Puerto Varas y posteriormente dan clases de teatro a los seleccionados. “Carnaval del Sur es el trabajo artístico de máscara en el espacio público, sobre todo en bosques, en playas, en lugares donde se le da un doble propósito al proyecto. Es un espectáculo que dialoga con la naturaleza”, explica.

Cada año, Carnaval del Sur reúne a un elenco de más de 300 artistas locales, nacionales e internacionales, produciendo un evento de alto nivel. La iniciativa trabaja varios proyectos culturales y sociales a lo largo del año, razón por la cual su fundadora y directora fue ganadora del Premio Mujer Impacta 2023 en la causa cultura y vida sana.

Cambiando perspectivas

“Carnaval significa liberar la carne y le quise dar un cambio, un sentido metafórico a ese concepto. Para mí el carnaval es una carne olvidada, es lo que nos conecta con lo más importante que es la naturaleza. Faltan estos espacios de expresión y de liberación”, expresa.

Respecto a la máscara de uso teatral, que es el elemento que distingue a Carnaval del Sur, Carolina dice que ayuda a que no existan las clases sociales. Además, “la máscara permite un espacio de encuentro en un contexto saludable. Es una herramienta pedagógica, más que un elemento estético”.

En sus palabras, Carolina cuenta que Carnaval del Sur viene a mejorar la calidad de vida de las personas por medio de las artes, principalmente el teatro y la máscara. Tiene dentro de sus objetivos generar pensamiento crítico, inspirar a investigar, conocer y generar una comezón en la ciudadanía respecto a la cultura y el patrimonio. Y, por supuesto, a mejorar la infancia, hacer un evento donde cada niño pueda ver una ventana, puerta y camino diferente.

A Carolina le conmueve como niños y adultos se sorprenden con el espectáculo: “He visto llorar a adultos en Carnaval del Sur porque les ha venido una reminiscencia. Se me han acercado varios papás a decirme que habían vuelto a sus siete años. Ese yo creo que es el mensaje más profundo que tiene: es conectarse también con tu niño interior, y es que otro foco importante del proyecto es el cuidado de la infancia, que está muy desprotegida”.

Reparando mediante el arte

“La realidad que se vive en las residencias para niños es brutal y lejana a la gente. Las personas no se cuestionan la contención emocional y la necesidad de experiencias positivas y memorables en los infantes”, dice Carolina.

Por eso crearon el programa Modelo de Intervención Socioteatral: Laboratorio de Creación Carnaval, para niños que viven en residencias de menores. “No podemos cambiar el trauma, pero sí podemos ocupar el arte como una herramienta de reparación y resignificación de este”, agrega la directora.

El programa recibe a 57 niños de la red de protección Mejor Niñez. Se les dan clases de teatro, aplicando una pedagogía centrada en la psicología y el arte, creada por el profesor francés Jacques Lecoq. Carolina le da una nueva interpretación y lectura, y la enfoca en reparar traumas complejos.

“Muchos niños me han marcado. Llevo un vínculo muy cercano con ellos y he visto sus procesos, y lo difícil que es salir adelante siendo un niño que ha sido abandonado y que vive en un sistema residencial. Somos una cultura en constante transformación. Ese cambio es lento, y yo se lo cedo a las nuevas generaciones. Por eso mi foco está ahí”, explica.

Agente de cambio

Mujer Impacta decidió reconocer su entrega a la comunidad y para ella fue sorprendente: “Me gusta reencantarme, me dejé fluir por el Premio Mujer Impacta. Me interesó mucho el trabajo que hacían las otras mujeres, hay proyectos muy bonitos y desafiantes que me importan muchísimo, que son de gran nobleza y enfocados en el recurso humano”.

Respecto a lo que espera de la fundación, agrega: “Espero trabajar con la red. Con un trabajo colaborativo se pueden hacer grandes cosas, porque los grandes cambios se manejan por voluntades”.

Finalmente, Carolina Cruz describe una imagen que recuerda constantemente: el suspiro de emoción de los niños de Puerto Varas al ver la presentación de Carnaval del Sur, y eso, es lo que la motiva a seguir haciéndolo. Durante el año la iniciativa también se dedica a hacer espectáculos teatrales en las calles y plazas de Puerto Varas, e instalar mosaicos en el espacio público.