Tras días de angustia en las que los medios de comunicación y miles de chilenos acompañaron de cerca el caso de Tomás Bravo, el niño de tres años y siete meses que desapareció el 17 de febrero y fue hallado muerto la semana pasada, Magdalena Muñoz es tajante: “debemos llegar de forma oportuna a las familias”. 

Premio Mujer Impacta 2016 y co-fundadora de Ideas para la InfanciaMagdalena fue la invitada especial de este martes del bloque semanal “Ciudadanas que impactan” en ADN Radio junto a los periodistas Aldo Schiappacasse y Sandra Zeballos.

En el programa, Magdalena abordó las falencias actuales del sistema de protección a menores. Según ella, hoy el Estado llega a las familias y a los niños con un proceso judicializado, a través del Sename. “Llegamos tarde, cuando el niño ya está sufriendo una vulneración de sus derechos”, detalló, mencionando el caso de Tomás Bravo.

De acuerdo con Magdalena, Chile debe preocuparse de contar con servicios que lleguen antes: “El proceso judicial genera mucha angustia para las familias, es una intervención muy difícil. Cuando podamos poner un servicio que provenga del Ministerio de Desarrollo Social y/o del Ministerio de la Familia todo va a ser diferente, porque no será judicial”. 

La co-fundadora de Ideas para la Infancia insistió en que todos los niños son vulnerables independientemente de su estrato socioeconómico. Asimismo, planteó que “la mayoría de los padres sí quiere a sus hijos, pero no siempre sabe cómo hacerlo… Y nosotros no queremos que los papás colapsen, que las familias lleguen a situaciones extremas”. 

Tras crecer en un hogar rodeado de mucha pobreza y violencia, una casa humilde que no siempre tuvo baño, ni ventanas, Magdalena realizó trabajos en varias instituciones vinculadas a la infancia, como Protectora de la Infancia y el Sename. 

Viendo el déficit que existe para evaluar e intervenir las familias, decidió junto a dos amigos investigar metodologías basadas en evidencia para enseñar a otros profesionales. Así comenzó a tomar forma su fundación, cuya misión es contribuir al fortalecimiento de buenas prácticas de los equipos profesionales que trabajan con y para los niños, niñas adolescentes y familias a nivel nacional e internacional.

“Lo que nosotros estamos proponiendo es que tengamos sistemas para detectar cuándo una familia necesita de apoyo. La idea es prevenir situaciones como la de Tomás con padres que requieren orientación”, afirmó Magdalena. 

No lleguemos tarde. No lleguemos cuando tengamos que lamentarnos de estas situaciones”, insistió.  

Avances y temas pendientes 

En Chile hay alrededor de 1600 niños en residencias. A ese respecto, Magdalena ha sostenido que, si queremos reducir ese número, hay que hacer prevención temprana con parentalidad positiva y también reinserción a largo plazo cuando no es posible trabajar con las familias a tiempo. 

Según Magdalena, tanto la sociedad como el Estado debe comprender qué es lo que pasa con los jóvenes antes y después que salen de esas residencias. Entender que, al salir, tienen 18 años y se ven desamparados ante un mundo para el cual no fueron preparados. Tener en cuenta que son chicos que pasaron por mucho en su vida, que traen el peso de su historia en la espalda.

En la misma línea, los periodistas mencionaron un estudio de la Fundación de San Carlos de Maipo que reveló que uno de cada dos hombres que están en la cárcel pasaron por el Servicio Nacional de Menores estando en el sistema residencia o en un centro cerrado

Sobre eso, Magdalena comentó que desde hace años ha insistido en la necesidad de contar con una salida asistida de las residencias para apoyar a los jóvenes. Eso significa que el Estado debería subvencionar a los adolescentes hasta que tengan las condiciones mínimas para hacer frente a su vida de forma independiente.

 “Y les tengo una buena noticia: desde 2020 el Estado está financiando una casa asistida, una casa en muy buenas condiciones, en condiciones dignas”, destacó. 

Magdalena detalló que a través de ese tipo de iniciativas es posible apoyar a los jóvenes a estudiar y a encontrar empleos para “romper los círculos viciosos” en los que, por tener una historia de infancia difícil, un joven la replica hacia la siguiente generación. 

Pese a las buenas noticias, Magdalena hizo hincapié en que los constituyentes elegidos en abril deberán incorporar dentro de la nueva Carta Magna una ley de garantía de los derechos de la infancia. 

Al final del programa, Magdalena contó que durante la pandemia su fundación tuvo que desarrollar una serie de actividades online para reinventarse. “Fue difícil, pero lo logramos”, aclaró.

Además, comentó que Ideas para la Infancia está desarrollando importantes investigaciones y cursos en temas como reunificación familiar, apoyo a adolescentes que viven en residencias de acogida y parentalidad positiva, tanto en Chile como en Colombia.